sábado, 6 de diciembre de 2014

De la C a la C (4): Estilismo superheróico


Dejad que hoy me meta en la piel de Chabelita Iglesias para comentar por encima cómo visten los superhéroes. Bueno no, que me da grima. Pero sí que voy a comentar cómo visten los superhéroes.
Dejad que haga una profunda inmersión por las innumerables referencias que llevan al actual uniforme de casi todos los superhéroes. Dejad que use el machete de mi sapiencia para cortar las enredaderas que tapan las influencias fundamentales en esta selva del estilo y la moda. Tras años de estudios, estas son mis conclusiones:
Los superhéroes se visten de Superman

Esto tiene bastante sentido: Superman fue el primer superhéroe del cómic (creo que hay poca polémica al respecto) y por lo tanto el modelo en el que se fijarían todos los demás. Entonces, la pregunta necesaria es: ¿De dónde sacó su traje superman?
No hablo de de dónde sacó su traje el personaje sino qué influencias tuvieron Siegel  y Shuster para diseñar el uniforme. En un momento u otro de nuestra vida hemos escuchado algo del tipo “¿Nianoniano noniano por qué lleva Superman los calzoncillos por fuera?” Bueno, hay tres respuestas válidas a esta pregunta:

    1-      Superman fue creado en 1938, el slip se inventó en 1934. En esos 4 años no se había popularizado su uso hasta el punto de que esa imagen se relacionara con la ropa interior.

      2-      Las mallas que cubren todo el cuerpo con una especie de “suspensorio” por fuera era una imagen que reconocían los americanos, ya que era el uniforme no oficial de los forzudos de circo. Así que daba esa imagen de personaje fuerte y misterioso y predisponía a la maravilla y la fantasía:

3    3-      En la llamada “edad de oro” de los superhéroes (finales de los 30 a principios de los 50) la calidad del papel de los cómics y del color era muy mala, tendiéndose a colorear solamente la portada. Por ello se utilizaban colores muy planos y bordeados muy definidos en negro. Eso obligaba a dejar muy indefinidas las partes “interiores” del dibujo. Y eso suponía un problema, porque los superhéroes tenían que ser “muy hombres” o “muy mujeres”. Pocas mujeres con una copa a y muchos hombres con un par extra de calcetines. Al no poderse definir de otra forma, se utiliza un “calzoncillo” de otro color sabiamente sombreado. Obsérvese en los siguientes ejemplos la sutileza
 











Así que, una vez resuelto el por qué del uniforme nos falta un detalle. ¿Y la capa? Las influencias directamente anteriores a Superman eran las novelas Pulp y los cómics de ciencia ficción, y en ninguno de estos casos aparece una capa. Así que, ¿de dónde vino la idea?
Muchos personajes se basan a la hora de su creación en personas reales, generalmente actores (Ironman en Howard Hughes, Green Lantern en Paul Newman, el Capitán América en Robert Redford, etc.) Los propios Siegel y Shuster dijeron que se habían basado en Douglas Firebanks Sr como modelo para Superman. ¿Y cuál fue uno de sus personajes más memorables?
(Por cierto, los creadores del Hombre de Acero eran unos cinéfilos de cuidao. El nombre de Clark Kent lo sacaron de los actores Clark Gable y Kent Taylor) La capa tiene la ventaja en el mundo de la imagen fija de que crea movimiento y permite “ver” el viento, lo que mejoró sensiblemente la sensación de vuelo en las viñetas.
Así que ese fue el modelo básico para los superhéroes durante muchos años. Aún sigue siéndolo en muchos casos. Un traje bien ceñido al cuerpo (para que los dibujantes puedan poner bien de músculos) con el calzoncillo por fuera (para que se sepa que hay paquete sin que el Comic Code nos diga “Fuera ese paquete”) y capa si queremos que sus vuelos o saltos sean más espectaculares. Colores vivos para llamar la atención excepto en el caso de personajes oscuros tipo “I’m Batman!” y algún complemento que le dé su aquel al personaje. Y ya. Otro súper a la hucha. El caso femenino lo desarrollaré más adelante, pero se resume en “Quítale más ropa”.
 
23 años de superhéroes cincelados en mármol después, un casi joven llamado Stan Lee decidió crear un nuevo tipo de superhéroe con problemas reales. Uno de los primeros se enfrentó al problema de que su físico, en vez de levantar admiración, deseo y celos, incitaba al miedo y al rechazo. Fue el primer superhéroe de aspecto grotesco. Hablamos, por supuesto, de Ben Grimm,  la Adorable Cosa de ojos azules
Gracias a la creatividad a día de hoy siguen apareciendo superhéroes con aspectos innovadores, e incluso con aspecto corriente que por el desarrollo de guión nos dejan ojipláticos o con el culo torcío.
Gracias por leerme y por ser tan bonicos. La semana que viene seguiremos aquí, repasando el cómic de la C a la C

Excelsior!

1 comentario:

Laura PD dijo...

Chabelita Iglesias, Chabelita Pantoja y otros iconos de la moda lloran de rabia y envidia ante tu certero análisis. Gracias por otorgarnos una vez más la luz de tu sapiencia.